Tout investissement spéculatif, qui contient des incertitudes, est interdit en Islam. Les musulmans sont également conviés à respecter leur dépense pour ne pas succomber à la dette ou pour ne pas faire des dépenses folles, c’est aussi l’une des raisons pour lesquelles le trading est Haram. Qu’en-est-il du crypto-monnaie ? Ci-après les détails.
¿Las criptomonedas están prohibidas?
Los especialistas en finanzas islámicas declaran que el cripto es una inversión especulativa. Por lo tanto, es prohibido ya que contiene “gharar” o incertidumbre, peligro o riesgo, en otras palabras, la venta de lo que no existe.
Además, Alkaff AlHashmi, cofundador de Islamic Coin, declaró que:
“la sharía prohíbe y considera nulas las transacciones que se basan en el azar o la especulación en lugar de un esfuerzo por producir un rendimiento.”
Sin embargo, insiste en que el principio no prohíbe la especulación comercial en transacciones comerciales. De hecho, las leyes de la sharía son lo suficientemente inteligentes y flexibles para adoptar cambios tecnológicos en cada época.
¿Y el Bitcoin: es Haram?
Los intereses sobre la deuda monetaria, comúnmente conocidos como “Riba”, son Haram por razones éticas. Sin embargo, el Bitcoin es halal. De hecho, es poco probable que la deuda aparezca en gran medida en un mundo bitcoinizado. Esto por razones económicas. Los riesgos se evaluan correctamente, y pueden ser compartidos de manera legítima en lugar de ser transferidos deshonestamente.
Además, la ética de los bitcoineros se basa en el principio de baja preferencia por el presente. Así presenta una clara semejanza con las normas culturales de la economía islámica. Según Abul Ala Mawdudi:
“Corresponde a cada miembro de la comunidad musulmana vivir según sus medios. Se le prohíbe dejar que sus gastos superen sus ingresos, lo que lo llevaría a pedir ayuda a otros para financiar sus excesos, a utilizar medios inmorales para apoderarse de la riqueza de los demás, o a endeudarse con otros para ayudarle a financiar sus necesidades incesantes y, al consumir sus recursos para pagar su deuda, finalmente unirse a las filas de los indigentes.”
